educación universitaria adultos.

Si eso fue todo.

Ella amaneció tirada en el suelo del comedor, sin ropa. Cuando despertó, la luz del sol entraba por los ventanales iluminando su cara. No sabía que hacía allí, ni que había ocurrido la noche anterior. Hasta que recordó todo. Estaba algo dolorida y se sentía cansada, sedienta. Miro a su alrrededor buscando algo con que cubrirse, pero no había nada de ropa cerca de ella, tendría que ir al piso de arriba al dormitorio. Se levantó con dificultad, y se fue agarrando a los muebles cercanos para incorporarse. No fue fácil. Se sentía lenta y pesada. No había ninguna de las chicas por allí, se habrán ido todas, se preguntó a sí misma. Supongo que sí, pero al subir a la habitación del piso superior escucho voces. Inma e Inés, sí estaban, se oían risas apagadas, amortiguadas. Estás aún siguen la fiesta, pensó. Y le vinieron imágenes de la noche anterior. Un grupo de chicas, descontroladas, bebiendo, fumando, armando jaleo, hasta que llego la policía. Un vecino las denunció y allí se acabo la fiesta, pero que hacía desnuda en el comedor? 

Y que hacían aún en su casa Inés e Inma ? Aún bebían ? Pensar en la bebida, le hizo sentir de nuevo el aguijón de la sed, su garganta seca, su boca pastosa, el frío que sentía. 

Las risas estallaron en cuánto abrió la puerta del dormitorio, Inma e Inés, la miraron y se miraron entre ellas y se reían a carcajadas. Ella se fue corriendo a ponerse algo de ropa, no estaba de humor para seguir con las bromas. Le dolía todo. Y tenía una sed horrible, después de cubrirse rápidamente con un batín de satén rosa palo, se fue al baño a beber agua. Tras beber unos cuantos vasos de agua seguidos, uno detrás de otro, casi sin respirar. Volvió a la habitación, las chicas hablaban en susurros, pero no podían parar de reir. 

Buenos días, acertó a decir, mientras con el dorso de la mano enjuagaba su boca. Interpreto las risotadas de la chicas como un buenos días de respuesta. Y se quedaron mirando, las tres. Al fin Inma, acertó a decir.Por fin te has despertado bella durmiente.Que hago desnuda en el comedor ? Les preguntó.

Más risas esta vez histericas, mientra las chica se retorcían en la cama y pataleaban. Ellas también estaban a medio vestir. Recuerdas algo, dijo ahogando la risa Inés ?

No mucho, pero algo sí, respondió ella. Vino la policía y se acabó la fiesta. Otra vez estallarón en risas sus amigas. Esta vez mirándose la una a la otra con cara de sorpresa. No, cariño. Cuando se fue la policía, empezó la fiesta! Que quieres decir, respondió. Mientras se encendía un cigarrillo. 

Que fue cuando empezaste a poner música suave y a hacer el strip-tease. Estaban serias y se miraban la una a la otra, como si lo que fuerán a decir tuvieran que hacerlo midiendo muy bien sus palabras. 

Qué hice qué ? Que te desnudaste al escuchar, el tema de Joe Cocker de nueve semanas y media. Ella dió una fuerte calada, y se sentó a los pies de la cama. No podía creer lo que le contaban sus amigas. Que hice un strep-stease, penso? Y no logró recordar nada. Voy a hacer café, dijo Inés. Nos vendrá bien a todas. Y salió de la habitación en dirección al piso de abajo, a la cocina. Ella miró sin saber que decir, sólo fumaba su cigarrillo y comprobaba lo mal que olía su cuerpo. Se sentía pegajosa y sucia, sobre todo el pelo enmarañado.Una ducha no te vendría mal tampoco, le dijó Inma. Pues si, estoy de acuerdo dijo ella. Déjame que me acabe el cigarrito y me tomé el café primero. Pues claro, contestó Inma. Y se quedaron mirando la una a la otra en silencio, Inma la sonreía con simpatía. Ella le devolvió la sonrisa como mejor pudo. Cuentame que hice anoche, le dijo a Inma. Inma, asintió con la cabeza. 

Lo de antes de la polícia no, eso lo recuerdo más o menos. Lo que no recuerdo es después. 

Cuando la polícia se fue, se fuerón Marta, Esther y Micaela. Y nos quedamós tu y yo e Inés. Ella asentía, escuchando con atención.

Bajaste la música y pusiste la radio. Que puse la radio, dijó ella sorprendida y negando con la cabeza. Sí, pusiste la radio. Empezamos a charlar y seguimos bebiendo, tu bastante. Ella resoplo al oír esto. Y cuando sonó la canción de Joe Cocker, empezaste a bailar con la copa en la mano por el comedor y empezaste a quitarte la ropa… Dijo lentamente Inma, mirandola con dulzura

Por qué no me habéis tapado al menos con una sábana, pregunto? Nosotras también bebimos, sabes ? Nos hemos despertado hoy, poco antes de que subieras a la habitación.  Inés y yo hemos dormido aquí juntas. Y ha pasado algo entre vosotras? Preguntó ella. Pero que dices, se te va tia se te va, dijo malhumorada Inma. No sé ni lo que digo, murmuró. 

Esta bien, contestó su amiga, mirándola severa. Bajemos ya debe estar el café. Vamos anda que lo necesitas!Asintió afirmativamente ella con la cabeza. Al bajar por la escalera, recogierón varios vasos y botellas que se encontraron en el suelo. Y las llevarón a la cocina. Justo en ese momento se oyó el silbido de la cafetera.Un delicioso aroma a café recién hecho, las recibió en la cocina.

Inés estaba preparando las tazas y sonriente las miro diciendo. Justo a tiempo. Sentaros, yo os lo pongo. Y  la miro y luego miro complice a Inma. Le has contado lo que paso, ya ? Pregunto. 

Si me lo ha contado, dijo ella sin poder esconder la verguenza que sentía. 

Bajo la mirada al suelo, para no tener que mirar a los ojos a sus amigas, mientras bebia su humeante taza de café. Inma e Inés se percatarón de lo que estaba sintiendo, y disimularon para que se sintiera un poco mejor. Eso fue todo?, se atrevió a decir

Si eso fue todo. Dijeron a las dos amigas a la vez.